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· Metralla mediática contra consejeros del IFE.
· PRI, venganza; PRD, resentimiento.
· Efrén García a comunicación del IFE.
El recorte al Presupuesto del Instituto Federal Electoral –IFE- fue el pretexto para que se iniciara un enfrentamiento entre los consejeros de ese organismo y los legisladores del PRI y del PRD. El descontento de Luis Carlos Ugalde y sus colegas es por la reducción presupuestal, pero también porque con ésta, no se afectan de ninguna manera los beneficios que reciben los partidos políticos.
El reclamo de los consejeros del IFE a los diputados ya se hizo vía jurídica, pero ahora los diputados han aprovechado la coyuntura que se está presentando para cobrar facturas. Impulsando una campaña mediática perredistas y priístas, pretenden desacreditar y presionar a los miembros del Consejo General del IFE, para que renuncien o de lo contrario, amenazan con promover reformas que permitan su sustitución o iniciarles un juicio político.
La presión hacia los consejeros del IFE parece tener como antecedente el cobro de facturas. En la estrategia se están aliando legisladores del PRD y del PRI. Los perredistas, creen que el IFE manipuló el proceso electoral de julio de 2006 para afectar a su excandidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador; mientras que los del PRI quieren a Luis Carlos Ugalde y a los otros 8 consejeros electorales fuera del IFE, porque consideran que los traicionaron; toda vez que fue gracias al PRI como pudieron obtener sus cargos, pero en julio, sólo sirvieron a intereses personales y compromisos que hizo Elba Esther Gordillo.
Estamos comprobando que, como dice la sabiduría popular: “lo que mal empieza mal acaba”.
Así parece ocurrir con los consejeros electorales del IFE: Luis Carlos Ugalde Ramírez, Andrés Albo, Virgilio Andrade, Marco Gómez, Teresa González, Alejandra Latapí, Lourdes López, Rodrigo Morales y Arturo Sánchez, quienes en octubre de 2003, fueron nombrados mediante un procedimiento muy cuestionado legal y políticamente, tanto por el procedimiento que se utilizó para designarlos –acuerdo partidista, que operó la entonces jefa de la fracción parlamentaria del Tricolor en la Cámara de Diputados-, como por los perfiles profesionales que tenían.
Recordemos:
Ø Virgilio Andrade Martínez, militante priísta, abogado del ITAM, trabajó como asesor de César Augusto Santiago y Arturo Núñez, su padre Virgilio Andrade Palacios formó parte del grupo de abogados defensores del dirigente petrolero Carlos Romero Deschamps. Trabajó en la Secretaría de Gobernación a las órdenes de Patrocinio González (1993) y de Emilio Chuayffet (1996). En ambos periodos formó parte de los equipos gubernamentales para la reforma electoral. Desde hace varios años, los Andrade tienen estrecha amistad con el excandidato presidencial del PRI, Roberto Madrazo Pintado. Además, entre 1989 y 1990 Andrade Martínez fue asesor de Ana Paula Gerard, secretaria técnica del gabinete económico de Carlos Salinas de Gortari y actualmente esposa del expresidente de la República.
Ø Alejandra Latapí Renner, exenlace del Consejo Coordinador Empresarial con el Poder Legislativo, incluída en la lista de militantes del PRI que aportaron fondos a la campaña presidencial en el año 2000.
Ø Marco Antonio Gómez Alcantar, abogado especialista en temas fiscales y electorales, exempleado de Emilio Chuayffet y de César Camacho Quiroz, y excolaborador del Despacho Jurídico Baker and Mackenzie
Ø Luis Carlos Ugalde, profesor de ciencia política del Centro de Investigación y Docencia Económicas y especialista en análisis de rendición de cuentas de instituciones públicas y del Congreso, hombre cercano al ex embajador de México en Estados Unidos y actual director de PEMEX, Jesús Reyes Heroles
Ø Andrés Albo, exconsejero local del IFE en 1997 y 2000, exfuncionario de Banamex, amigo de siempre de Felipe Calderón Hinojosa.
Ø Rodrigo Morales, exconsejero electoral del Distrito Federal.
Ø Teresa González Luna, de vieja familia panista y consejera electoral de Jalisco.
Ø Arturo Sánchez Gutiérrez, exdirector ejecutivo de prerrogativas y partidos políticos del IFE, puesto que le heredó su amigo Juan Molinar Horcasitas, actual director del IMSS, cuando pasó a ser consejero en 1996.
En octubre de 2003, el nombramiento de Luis Carlos Ugalde y de sus colegas fue producto de una de las tantas aberraciones que tiene nuestra legislación, que permite que sean los propios partidos –partidocracia- los que eligen a quienes van a arbitrar las elecciones y que podrían incluso enjuiciar los actos que cometen esos mismos partidos.
Lo malo es que el IFE, conforme se ha partidizado, ha ido perdiendo credibilidad porque está desarrollándose con las mismas conductas negativas y vicios de los partidos: pugnas internas entre su burocracia por hacerse de posicionamientos internos y del control de los recursos públicos que se destinan a intentar conservar nuestra costosa democracia… liderazgos improvisados… centralización de la toma de decisiones en una elite burocrática… tendencia a formar equipos de trabajo sólo con amigos… realizar concursos amañados para seleccionar personal, donde, de antemano se sabe quién va a ganar, etc.. De manera que a pesar de que en el IFE conviven personas con serias diferencias ideológicas, las conductas negativas y los vicios tienden a igualarlos.
Ahí se encuentra la explicación de porqué el trabajo de los consejeros del IFE no ha sido eficiente y por su inexperiencia en materia electoral, su labor ha ido de la mano de la provocación de escándalos y fricciones. No se podía esperar un trabajo satisfactorio de un grupo de personas improvisadas, quienes en su mayoría fueron elegidos sin satisfacer los requisitos legales.
Los consejeros siempre han sido criticados por su ineficiencia y desde julio de 2006, por su favoritismo. Sin embargo, junto con sus amanuenses, siempre se defendieron con el argumento de que toda crítica, era un ataque a la institución que estaba consolidada como el árbitro electoral de México. Pero eso ya nadie lo cree.
Su ineficiencia es manifiesta, porque Luis Carlos Ugalde y sus colegas, desde octubre de 2003, cuando fueron nombrados como consejeros, se la han pasado enmendando errores y generando problemas a los partidos políticos, dentro del propio Instituto y en los órganos legislativos donde Ugalde ha aplicado la filosofía de "La Chimoltrufia", ya que así como va y les dice una cosa a los legisladores, a los pocos días niega lo que dijo y les dice otras.
Luis Carlos Ugalde y los otros 8 consejeros que conforman el Consejo General del IFE, no han podido cumplir con ninguno de los objetivos que se les impusieron cuando fueron nombrados.
En más de tres años de trabajo, no han lograron establecer reglas para que el Congreso de la Unión legisle sobre la regulación de los gastos que se realizan por parte de partidos o aspirantes en la etapa de las precampañas, no obstante que saben de los excesos que cometieron "Los amigos de Fox" en el año 2000, y los protagonistas del llamado “Pemexgate”, razón por lo que los recursos que utilizaron los precandidatos y candidatos presidenciales el año pasado, estuvieron totalmente fuera del control de los partidos y de la Ley.
Su poca efectividad también se evidenció en asuntos tales, como: el voto de los mexicanos que viven en el extranjero, que implicó un sonoro gasto y fue un rotundo fracaso; el acceso del IFE a las cuentas bancarias de los partidos; y sobre todo, el trabajo realizado durante la elección del Presidente de la República en julio de 2006, cuando provocaron serias suspicacias, que incluso dañaron la legitimidad del triunfo de Felipe Calderón Hinojosa y dejaron serias dudas en el PRD, en el PRI y las otras fuerzas políticas.
Luis Carlos Ugalde y sus colegas, no han garantizado imparcialidad. Han dado al traste con la autonomía con la que se construyó el instituto, por lo que terminaron con el prestigio, credibilidad y fortaleza que alcanzó el IFE entre 1994 y el año 2000, cuando fue árbitro de dos elecciones competidas: en 1994 el PRI ganó la Presidencia con un alto porcentaje de votación y sin impugnaciones de ningún tipo. En el 2000 el PRI entregó la silla presidencial al PAN en un contexto de paz y gobernabilidad, con lo cual se demostró que en un país que aspira a consolidar su democracia, las elecciones son indiscutiblemente la única vía pacífica y legal para llegar a los gobiernos y a los cuerpos legislativos. De tal manera que el IFE se convirtió en el garante de la democracia.
Lo que mal empieza mal acaba, pero si los actuales consejeros del IFE logran resistir esta andanada en su contra, es seguro que permanecerán en sus cargos hasta el año 2011, disfrutando todas esas ventajas que el cargo les da.
MURMULLOS
La democracia es un estilo de vida
Marco Polo Sevilla Navarro, abogado de la escuela Libre de Derecho y con estudios de postgrado en instituciones educativas europeas, como la universidad francesa de La Sorbonne (Panthéon-Sorbonne), impartió una plática a un grupo de periodistas, ante quienes sostuvo que la democracia debe ser un estilo de vida, no sólo un modelo institucional con determinada forma, sino, sobre todo, la autoinstitución explícita y reflexiva de la sociedad. Para ello, afirmó el jurista y actual asesor del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, deben aplicarse ciertos procedimientos como la separación de lo jurídico, lo legislativo y lo gubernativo. Indicó que la democracia conlleva movimiento, versatilidad y requiere del conocimiento y la participación de todos en el establecimiento de la Ley.
Renuncia Gustavo Lomelín Cornejo al IFE
En exclusiva para los lectores de Barahúnda Política, logramos saber que los primeros damnificados por el escándalo que se ha suscitado debido al enfrentamiento entre los legisladores del PRD y del PRI, y los Consejeros Electorales del IFE, fueron: Gustavo Lomelín Cornejo, coordinador nacional de comunicación social y Gustavo Varela Ruiz, director ejecutivo de administración. En el lugar de Gustavo Lomelín Cornejo, ya despacha en el edificio C del IFE, desde la semana pasada, el exdirector de análisis y evaluación del IFE, Efrén García García, quien ya se desempeñó como director de comunicación social de la Procuraduría para la Defensa del Consumidor (PROFECO) y de la Comisión Reguladora de Energía. Es un funcionario con experiencia en medios, por lo que seguramente no tendrá problemas para ser ratificado por el Consejo General del IFE. En el caso de Gustavo Lomelín Cornejo, se nos asegura que podría ser incorporado a manejar los asuntos de prensa en PEMEX.
Misterio
La versión de la posibilidad de un estallido social no surge de un escritorio burocrático o de un espacio periodístico de algún colega. Líderes sociales, sacerdotes y maestros nos alertan al respecto. Los incrementos a los precios de los productos de primera necesidad podrían incentivar movimientos sociales e incluso hacer renacer la guerrilla o la lucha armada. Muy cerca de nosotros, en colonias de Iztapalapa, en Hidalgo, en Guerrero, en el estado de México y en varias partes del país, la pobreza extrema es un clamor. La derecha en el poder debe tomar previsiones. Impulsar un nuevo esquema institucional, fortaleciendo opciones políticas de centro, capaces de abanderar la demanda social que desde julio de 2006 quedó sin espacios de participación ante la polarización política en que derivó el proceso electoral. La amenaza de un estallido social, acciones de desestabilización y un contexto de riesgo para la gobernabilidad, sólo podrá neutralizarse creando espacios de participación política donde quepan los sectores sociales populares así como mecanismos para dar soluciones reales a la demanda ciudadana. Quienes alertan sobre el descontento popular saben de lo que hablan y yo les creo.
La gente quiere resultados: Ricardo Aguilar Castillo
La única forma de ganarse la confianza de la ciudadanía es trabajando por la comunidad, porque la gente quiere resultados, que vivamos con ella sus problemas cotidianos y le ayudemos a resolverlos, sostuvo Ricardo Aguilar Castillo, presidente del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional en el Estado de México.
Al participar en dos encuentros con vecinos de la comunidad de Limón de San Lucas y de la colonia Rincón de López, el dirigente partidista afirmó que la gente no quiere que se acuda a ella sólo cuando se necesita pedir su voto en periodo de elecciones.
La gente quiere resultados, que estemos con ella de manera permanente; está cansada de discursos, demanda que vivamos sus problemas y demos solución a los mismos, añadió Ricardo Aguilar Castillo.
Escuche Barahúnda Política, todos los lunes, de 20:00 a 22:00 horas por Radio “La Mexicana”, 1530 de AM.
Por: Juan Jacobo Cázares G.
Jacobo_cazares@yahoo.com.mx
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